Alemania es un país que me encanta, diría que justo por detrás de Estados Unidos, por su cultura, su diversidad y, sobre todo, su idioma. Cuando tenía 15 años… qué tiempos aquellos… (parezco un abuelo) comencé a estudiar alemán y fui a la Escuela Oficial de Idiomas donde obtuve el título de grado medio. Se suponía que eso me ayudaría en una eventual búsqueda de trabajo en Alemania (soy Ingeniero Técnico Informático) pero para lo que me valió fue para enamorarme del idioma.
Desde 2004 hasta la fecha que pasado numerosas veces por el país bávaro:
- 2004: beca de la Universidad de Oviedo para un Tamdenkurs de 5 semanas en la Rüth Universität de Bochum.
- 2007: tres días de congreso en Frankfurt.
- 2010: semana de vacaciones en Berlín.
- 12 escalas en los aeropuertos de Frankfurt, Munich, Düsseldorft y Hahn.
En este artículo encontraréis datos e información interesante, mi experiencia en Alemania y fotos… que son un poco antiguas ya que por aquel entonces no sabía que iba a compartir todo esto con vosotros en un blog, pero seguro que os servirá para conocer un poco más éste país.
2004: Bochum y alrededores
Sin duda la vez que más conocí de Alemania fue en el verano de 2004 disfrutando de la beca en la Universidad: teníamos clases por las mañanas y por las tardes, con el bono de transportes de estudiantes, nos dedicábamos a recorrer en tren todas las ciudades y pueblos del estado de Renania del Norte-Westfalia. Dicho así no suena muy conocido, pero veréis que hay mucho que visitar. Bueno, y también hicimos alguna fiesta que otra.
Köln (Colonia)
La ciudad más grande (y más bonita) es Colonia. Su catedral es enorme, aunque como me suele pasar en mis viajes, una de las torres estaba tapada durante la restauración. Además de visitarla por dentro, se puede subir a una torre para tener unas vistas espectaculares de la ciudad. Sin duda os recomiendo subir.
Además allí tomé la que creo que es mi cerveza favorita, la Kölsch. Es una típica Pils que me encantó. A diferencia que las enormes y habituales jarras alemanas, esta se toma en unos pequeños vasos de tubo tipo «chupito» alto. Tenéis que probarla.
Düsseldorf
En la ribera del río Rhein (Rin) se encuentra Düsseldorf. De hecho el mejor recuerdo que tengo es estar sentados en las escaleras del paseo hacia el río tomando unas cervezas con los amigos alemanes viendo el atardecer. La torre de televisión se iluminaba de noche con un original reloj que marcaba las horas a base de luces y puntos que se movían y sumaban.
A Bochum llegué desde el Aeropuerto de Düsseldorf, el tercero más grande de Alemania, y desde donde se puede decir que empecé mi afición a la fotografía de aviones (spotting). En la terraza hay un mirador, costaba 1,5€ acceder, desde donde se tienen unas vistas perfectas de las dos pistas principales. Recuerdo estar allí casi dos horas viendo aterrizajes y despegues. No tengo muchas fotos, así que espero volver algún día con más calma.
Bochum
A pesar de ser una ciudad grande de más de 350.000 habitantes, no recuerdo mucho de Bochum ni tengo muchas fotos. Quizá porque siempre nos íbamos a otros sitios a visitar cosas. Además de la Universidad, quedábamos también con los amigos alemanes en la calle principal que estaba llena de bares y cervecerías. Recuerdo precisamente que allí vi por primera vez la Formula 1 (con el gran Michael Schumaher y también Fernando Alonso) en multipantalla con múltiples cámaras y repeticiones.
Visitamos su interesante Museo de la Minería. Al resto de españoles les encantó, aunque a mi ya me sonaba «conocido» porque en Asturias tenemos el MUMI (Museo de la Minería y de la Industria), pero la verdad es que estaba bien. También vale la pena subir al castillete (la torre para el ascensor de bajada a la mina) porque las vistas de los bosques son muy bonitas.
Munster
Ciudad universitaria por excelencia y famosa porque allí se firmó en 1648 la Paz de Westfalia, se puede visitar en el ayuntamiento el documento de la firma en el que se acordaba el final de la Guerra de los Treinta Años. Además de pasear por sus calles, también vimos la Catedral (bastante diferente al resto de iglesias de la ciudad) e hicimos algunas compras en el mercado que había en la plaza.
Aachen (Aquisgrán)
Sin duda una de las sorpresas del viaje fue el pequeño pueblo de Aachen con una pequeña Catedral que fue la que más me gustó de todas las que vi en Alemania. Si estáis por la zona, visita obligada. Con medio día que reservéis es suficiente, para dar una vuelta pasando también por el ayuntamiento y la estación de tren.
Hattingen
La segunda sorpresa fue este pueblo 100% alemán con las típicas Fachwerk, casas blancas con la estructura de madera y tejados puntiagudos. Las calles son estrechas y empedradas. Vale la pena dar un paseo por Hattingen para conocer cómo es un auténtico pueblo alemán.
Otras visitas
También estuve en Xanten, el pueblo es bonito, pero en realidad habíamos ido a ver el museo de ruinas romanas y fue más que decepcionante. Apenas había ruinas y sí muchos carteles con dibujos de qué se supone que había habido ahí.
Una tarde fuimos hasta Essen para conocer la Villa Hügel de la familia Krupp.
Otra visita de una tarde/noche fue Dortmund, pero fuimos de fiesta y no hay fotos.
2007: Franfurt
Estuve 3 días en Franfurt (y muchas veces en su gran aeropuerto, el tercero con más volumen de viajeros de Europa, para hacer transbordos) pero apenas tuve tiempo para dar una vuelta por el centro para ver la Catedral y el centro financiero. No obstante, no es una ciudad que me llame para volver, a diferencia por ejemplo de Budapest que estuve en la misma situación pero me pareció espectacular.
2010: Berlín
Tengo una relación de amor-odio con Berlín. Por un lado hubo algunas cosas que me encantaron pero otras que me decepcionaron mucho.
Entre las primeras destacar el Museo de Pérgamo en la Isla de los Museos. Es es-pec-ta-cu-lar, el museo que más me ha gustado del mundo, por encima del Louvre o del Museo Británico. El Busto de Nefertiti es impresionante, para quedarse un buen rato mirándolo.
No voy a decir la cantidad de cosas impresionantes que tiene, porque escribiré un artículo específico con todo, pero la Puerta del Mercado de Mileto o la colección de sarcófagos egipcios… Eso sí, los los alemanes hicieron un expolio importante en medio mundo, pero consiguieron un museo inigualable.
Otro museo que hay que visitar sí o sí es el Museo de la Tecnología. Es enorme, así que tenéis que reservar unas cuantas horas para visitarlo con calma. Tienen grandes salas con coches, trenes e incluso aviones donde explican mucho de la historia de la tecnología alemana.
Pero por otro lado hay cosas que me decepcionaron. Puede ser porque tenía tantas ganas de ir que me esperaba algo más grande o espectacular. Por ejemplo, el Check Point Charly que parece una caseta de cartón o el propio Muro de Berlín, que parece una tapia de un solar. Después de lo que supuso para Europa el Muro, su caída, las historias de los intentos de salto,… al final solo quedan unos pequeños trozos de muro mal cuidados.
Llama también la atención, como es lógico, la mezcla entre tradición y modernidad arquitectónica de la ciudad. Se nota gran diferencia entre la zona de Berlín Occidental de la Oriental, cómo se ha reconstruido la ciudad y cómo se alternan los nuevos edificios con los que sobrevivieron a la Segunda Guerra Mundial. De hecho esta mezcla de cultura alterna y okupa se puede ver perfectamente en «Tacheles«, un edificio lleno de artistas, talleres y exposiciones, uno de los símbolos de Berlín que, desgraciadamente, fue desalojado en 2012.
Aproveché para visitar Potsdam, un pueblo que está a 40 kilómetros y que es famoso por el Parque de Sanssouci. Se trata de un conjunto de edificios construidos en el siglo XVIII por orden de Federico II de Prusia, ya que quería retirarse a descansar allí. El complejo está formado por un enorme parque, varios lagos y palacios, entre los que destacan el Palacio de Sanssouci, el Nuevo Palacio y el Palacio de la Orangerie.
Yo lo visité en febrero y estaba nevado y con poca vegetación, pero me imagino que en verano sea un bonito sitio para dar un paseo, además de visitar el interior de los palacios.
Galería de imágenes de los viajes a Alemania
Estas son algunas fotos más que hice en los viajes esos años, incluyendo las de aviones en los aeropuertos alemanes: