Nos encanta viajar por el mundo y aunque reivindicamos siempre lo nuestro, he de reconocer que conocer más a fondo el occidente de Asturias es una tarea que tengo pendiente. Por suerte para nosotros, nos invitaron a participar en un pequeño blogtrip en Puerto de Vega junto a otros amigos bloggers de viajes y gastronomía de Asturias para conocer un poco más la zona y participar en una degustación de productos asturianos de la mano de D’Origo Astur.
En la RTPA nos hicieron una entrevista que podéis ver en el siguiente vídeo:
Hotel Pleamar
El punto de encuentro fue el Hotel Pleamar, que pertenece a la marca de calidad Casonas de Asturias y que tiene una decoración muy cuidada y hogareña. Milagros, su propietaria, nos dio la bienvenida y nos explicó un poco la historia del hotel. Siempre está bien conocer las realidades de profesionales del turismo que tienen una visión diferente y que han apostado por dar a conocer la zona, no solo el pueblo, colaborar con otras empresas y crear experiencias más allá de ofrecer simplemente un alojamiento. Ellos comenzaron hace doce años en una zona compleja turísticamente hablando. Ahora con la nueva autopista están mejor conectados y es más fácil para los turistas moverse por la zona. Inicialmente era una sola casa con 6 habitaciones, pero fueron creciendo hasta unir 3 casas con 9 habitaciones en total.
Nos invitaron además a un desayuno exquisito a base de productos caseros elaborados por ellos mismos, como decíamos, cuidan hasta el mínimo detalle.
Paseo guiado por Puerto de Vega
A continuación para seguir conociendo Puerto de Vega y su entorno, hicimos una visita guiada por el pueblo de una hora de duración. El bibliotecario, Ángel Méndez, que conoce como pocos la historia, cultura y tradición de la zona, nos puso en situación de esos tres aspectos. Sin duda Puerto de Vega destaca por su tradición conservera (la biblioteca actual era antiguamente una fábrica conservera) dado que siempre fue un puerto pesquero importante.
Hablaremos de todo lo que aprendimos en otro post que escribiremos pronto porque es muy interesante, pero nos gustaría destacar algunos datos, como el de la muralla original construida en 1587 y que todavía se conserva una parte, la tradición de la pesca de la ballena que se mantuvo hasta los años 70 o la casa donde falleció el ilustrado Melchor Gaspar de Jovellanos cuando huyó de Gijón en un Vergantín para escapar de los franceses.
Degustación d’origo astur en el Restaurante Regueiro
Nos dirigimos después hasta el Restaurante Regueiro donde ya nos esperaba Mar Vidal, gerente de D’Origo Astur con una muestra de los productos que íbamos a catar. Después de muchas fotos (es lo que tenemos los bloggers) nos sentamos a la mesa.
Mar nos contó que la empresa se fundó en 2013 y empezaron con su producto estrella, que es la faba asturiana con denominación de origen (Faba de Indicación Geográfica Protegida, IGP), ya que la cultiva su suegra. Comenzaron a comercializar formatos un poco diferentes a los habituales, ya que se dieron cuenta que los tamaños estándar eran muy grandes o a no todo el mundo le gustaba el compango. Por eso venden pequeños packs de 200 gr. que es la cantidad ideal para 2 personas. Además de la faba asturiana, también cultivan faba verdina, que a mi personalmente me encanta. Es más pequeña, tiene un tono verde y se comercializa en paquetes de 500 gr. La faba IGP también la venden en bolsas de 1 kg. y tienen una «pirámides» que saldrán próximamente a la venta con todos los ingredientes para hacer una fabada completa.
Todavía no habíamos probado nada, pero ya se nos hacía la boca agua.
Lo primero que catamos fueron sardinas del cantábrico en dos versiones, ahumada y marinada. Las sardinas se deshacían en la boca de los suaves que estaban pero dejando un sabor riquísimo. Aunque estaban las dos muy buenas, mi elección sería las sardinas ahumadas ya que era un sabor más a mar. Un detalle curioso es que no son conservas si no «medio conservas», se comercializan envasadas en blísters y su caducidad es más corta, sin embargo su sabor es más original.
A continuación de las sardinas, probamos las gildas, que es muy típico ver ese pincho en el País Vasco y nunca me había dado por probar. Craso error el mío, estaban espectaculares.
Después probamos una selección de quesos de Asturias. Entre ellos estaban el Afuega’l Pitu y Gamonéu, ambos con Denominación de Origen Protegida. Cuentan con productores seleccionados tanto para el Gamonéu del valle como el del puerto que hacen quesos desde 4 kg. y 7 kg. respectivamente.
Igual incluso más que las sardinas ahumadas y las gildas me gustaron los chorizos a la sidra (con Sidra Trabanco). Los chorizos (ahumados con madera de roble) me parecieron riquísimos, tanto en la versión con sidra como después en la fabada. Probamos también cordero xaldo guisado con patatines, un plato diferente para encontrar en este formato. Están mejorando la receta para sacarlo a la venta próximamente.
Y después de esta cata, llegó el momento de comer. Sí, en serio, más aún. Nuestro menú en el Restaurante Regueiro de Diego Fernández consistía en los siguientes platos:
- Croqueta de bechamel con jamón by Regueiro (Premio a la Mejor Croqueta del Mundo en Madrid Fusión 2015).
- Ensalada templada con sardina del Cantábrico ahumada d’Origo Astur.
- Fabada asturiana d’Origo Astur.
- Crema de maracuyá con contrastes by Regueiro.
Como veis el Chef Diego Fernández cocinó los productos de d’origo astur de diferentes maneras. Como es difícil transmitir sabores en un post, hicimos muchas fotos para que las veáis. Lo sentimos si dan un poco de envidia.
No es por ser crítico, pero aunque a todo el mundo le encantó, la croqueta a mi personalmente no me pareció tan espectacular. Pero es algo que va por gustos, me gustan las croquetas un poco más consistentes. La ensalada con la sardina, de nuevo con ese sabor potente e intenso.
La fabada, el plato fuerte, estaba muy rico. La faba en sí estaba perfecta: entera, suave y no se notaba nada el pellejo. De nuevo, el chorizo del compango estaba riquísimo. Un sabor muy intenso pero suave. Os aseguro que comí bastantes trozos más de los que me tocaban… Voy a poner otro pequeño pero, que es apreciación personal: me gusta el caldo más gordito en la fabada, pero eso no quita que estaba riquísima.
Y para terminar el postre fue divertido ya que intentamos sacar todos los ingredientes o «contrastes» que acompañaban a la crema de maracuyá. Yo diría que eran trocitos de menta, frambuesa o mora seca y gelatina de pera, pero es solo una suposición.
Quería hacer también una mención especial al vino que bebimos: vino tinto Bro Valero ecológico DOP La Mancha, variedad Syrah 100%. Gran elección.
A punto de reventar después de la degustación y la comida, llegó ya el momento de hacer la foto de familia y despedir a nuestros amigos: David de Les Fartures, Olaya de Abuenbocado, Victor Machbel, Avistu de Viajablog y Marta y Noelia de Empáchate.
Sin duda ha sido una experiencia gastronómica muy intensa, que también nos ha gustado por la parte turística, cultural e histórica de Puerto de Vega. Sin duda es una zona a la que tenemos que volver con más calma. Os dejamos con más fotos que hicimos en el pueblo y durante la comida.
Galería de imágenes del blogtrip gastronómico en Puerto de Vega