Alejandría es la segunda ciudad más grande de Egipto famosa actual e históricamente porque allí se ubicaba una de las 7 Maravillas del Mundo Antiguo: el Faro de Alejandría. A 3 horas en coche al norte de El Cairo es un destino perfecto para hacer una escapada de 1 día. En nuestra primera visita a Egipto habíamos priorizado conocer bien la capital y disfrutar de un crucero por el Nilo, pero en este viaje no queríamos perder la oportunidad de visitar esta ciudad mediterranea. Os contamos todo lo que tenéis que ver y visitar en 1 día en Alejandría.
Cómo llegar a Alejandría desde El Cairo
En nuestro caso habíamos contratado un taxi en El Cairo que utilizamos dos días para desplazarnos por la ciudad. Llegamos a un acuerdo con nuestro conductor para llevarnos desde El Cairo hasta la costa, estar con nosotros durante el día para los traslados y volver. El precio que nos propuso fue de 80€ (éramos 4 personas). No era barato para los precios habituales allí, pero sin duda es la opción más cómoda viajando con aire acondicionado, directo sin paradas y sin tener que pensar en cómo moverte por la ciudad. Además ya conocíamos a Maher de días anteriores y era un excelente guía. La duración del viaje es en torno a 3 horas haciendo una parada.
La alternativa era ir en tren desde El Cairo a Alejandría por un precio aproximado de 6€ por persona pero se tardaban casi 4 horas por trayecto y los trenes de Egipto no son excesivamente cómodos ni cuentan con aire acondicionado. Amigos locales nos dijeron además que tienden a sufrir retrasos, por lo que intentar visitar en un día Alejandría yendo en tren era muy complicado.
Alejandría tiene aeropuerto y hay vuelos desde la capital. Sin duda es la opción más rápida pero es inviable económicamente hacer un vuelo en el día por su elevadísimo coste salvo que lo compres dentro de un paquete turístico con antelación.
Madrugando un poco y aprovechando el viaje para descansar llegamos a Alejandría casi sin darnos cuenta.
Catacumbas de Kom el Shogafa
Hay varias catacumbas en la ciudad pero estas son las más famosas y más impresionantes. Probablemente lo que más llama la atención es que aunque su descubrimiento data de 1900 el acceso completo a su interior no pudo ser hasta la década de 1990 debido a que estaban anegadas de agua. El descenso del nivel de agua permitió entrar a dos niveles niveles y dejó visibles varios pasajes, el vestíbulo y la cámara funeraria. Lo que más llama la atención es la mezcla de arte egipcio, romano y griego. Se usó entre los siglos I al IV d.C. en los que estas tres culturas tuvieron mucho contacto entre ellas.
Las fotos de las catacumbas están realizadas con el teléfono móvil porque no dejan el acceso con ningún tipo de cámara de fotos. Además según bajábamos de nivel la luz era cada vez más escasa así que simplemente aprovechamos para disfrutar de un lugar único.
El acceso a las catacumbas se realiza por una escalera en espiral que gira en torno a un pozo central a través del cual entra la luz. En el vestíbulo del primer nivel hay 2 nichos y nos encontramos con la primera decoración. Aquí se pueden ver ejemplos del arte griego y romano sobre la fertilidad y la diosa Afrodita de los primeros y también de Venus de los segundos.
Es increíble todo excavado y la cantidad de salas que hay en las catacumbas. Se pueden apreciar muchos sobre relieves perfectamente conservados «cuidando» las tumbas de las personas que allí descansan. También hay numerosas columnas con los capiteles muy trabajados y techos con dibujos y muchas figuras. En algunas zonas todavía se conservan las pinturas que había inicialmente y, a diferencia de otras ubicaciones, tienen el color original. No hay que olvidar que seguro diversas cámaras estuvieron cerradas miles de años lo que ayudó a mantener su estado de conservación.
La cámara funeraria es una combinación del arte y la arquitectura de las 3 culturas. Cuenta con un tipo de pronaos (templo) al que se accede a través de 2 escalones con grandes figuras de un hombre y una mujer a los lados. La tumba está defendida por unos guardianes, dos serpientes con doble corona griega. El interior cuenta con 3 nichos y con la imponente imagen de Anubis, el dios egipcio de la momificación.
La visita no es muy larga, aproximadamente media hora, y solo os encontraréis algunos carteles en el exterior con la historia de las catacumbas.
Anfiteatro de Alejandría
Alejandría siempre ha sido una ciudad multicultural como demuestra su famosa biblioteca de la que os hablaremos más adelante. Alejandro Magno la fundó y por allí pasaron los griegos, los romanos, el islam, los judíos,… Una de las muestras más claras de las diferentes épocas que ha vivido es el anfiteatro romano.
Este recinto, que también tiene un coste de acceso, se descubrió muy recientemente, en 1960. Es de época romana y data del siglo II y se usó durante casi 300 años. Alrededor del anfiteatro de Alejandría hay más restos aunque no se conservan demasiado bien. Hay una zona de habitaciones que se cree que era para los actores y actrices y se cree que tenía unas cúpulas.
Sí se pueden ver los restos de las columnas que creaban el pórtico y otros restos de una cisterna y unos baños.En esa zona sí se conservan restos del empedrado y los mosaicos dentro de una zona cubierta que los protege.
La visita es breve, pero la verdad es un tipo de edificación que no te esperas encontrar en medio de la ciudad egipcia.
Ciudadela de Qaitbay
La Ciudadela de Qaitbay o Ciudadela de Alejandría es uno de los dos edificios más famosos de la ciudad y que destaca porque se dice que allí es donde se ubicaba el Faro de Alejandría.
La Ciudadela es una fortaleza defensiva que se construyó en el siglo XV. Siguió siendo utilizada con este fin durante múltiples guerras hasta el siglo XIV y fue en el siglo XX cuando se restauró y ahora alberga un pequeño museo naval y el Museo Oceanográfico. Aviso importante: cuidado porque la entrada al museo es diferente de la de la fortaleza y nosotros nos confundimos entrando en un extraño/peculiar/desconcertante museo que mezclaba muchos tipos de animales y restos sin mucho sentido.
El interior del edificio está casi vacío y no se conserva ningún tipo de ornamentación ni arquitectura peculiar salvo una zona protegida en el suelo donde se puede ver el mármol con los mosaicos que lo cubrían en alguna de sus reconstrucciones.
Volviendo al exterior, recomiendo dar un paseo por todas sus murallas defensivas desde las que se puede ver el puerto, los barcos entrando, la estrecha playa de Alejandría e, incluso, la biblioteca a lo lejos. Sus jardines son pequeños, ya que es un edificio militar, tienen muchas palmeras y son visibles también desde todas las murallas.
Para mi fue uno de los mejores momentos del día, aunque las catacumbas me gustaron mucho, poder dar ese paseo viendo el mar, con la tranquilidad que había en la zona y con buenos amigos con los que hablar y disfrutar del día.
En las fotos se puede observar además que parece un castillo de cuento o de aquellos que construíamos en casa de la marca Exin cuando éramos pequeños. Visita obligada y también paseo obligado disfrutando del edificio y de las vistas.
Biblioteca de Alejandría
La Bibliotheca Alexandrina es el otro edificio más reconocible de la ciudad. En la actualidad es un edificio moderno que llama mucho la atención porque realmente la biblioteca está debajo de tierra y solo dos pequeños edificios se ven desde fuera: el cilindro de cemento, cristal y granito realizado con materiales que provenían de Asuán y que es un centro de conferencias, y el gran edificio inclinado que se adentra en la tierra donde están ubicadas las bibliotecas.
Digo bibliotecas en plural porque está la biblioteca principal que esperan que llegue a tener 20 millones de ejemplares, cuenta con 6 bibliotecas especializadas (arte y multimedia, infantil, juvenil,…), una biblioteca específica para personas ciegas y con deficiencias visuales, una sección Nobel y una de las que más me ha llamado la atención: una copia de Internet Archive (una copia de Internet Archive donde se guardan a su vez copias de todas las páginas webs del mundo). Pero eso no es todo, también cuenta con 4 museos dentro del edificio.
Como os podéis imaginar se necesitarían varios días solo para poder conocer a fondo la biblioteca de Alejandría. La verdad es que dentro no hay mucha información sobre el edificio y como ya no teníamos mucho tiempo solo entramos a dar una vuelta y ver las instalaciones a nivel general. De nuevo, en este edificio no se permite acceder con cámara de fotos y todas las mochilas son registradas a la entrada y la salida.
La Biblioteca de Alejandría es enorme y estaba llena de personas estudiando y consultando libros, al menos en la zona que pudimos acceder. El edificio es impresionante por dentro y por fuera. Os recomiendo también que le deis una vuelta al edificio y, si tenéis tiempo, en la zona que se adentra en la tierra hay un planetario que también podéis visitar.
Columna de Pompeyo y el cementerio
La columna de Pompeyo es otro de las edificaciones emblemáticas de la ciudad pero realmente es tan solo una columna en medio de una explanada en la que apenas hay ningún otro resto salvo alguna esfinge pequeña. Tras hablar con Maher, nuestro conductor, nos recomendó no ir porque después de todo lo que habíamos visitado esto nos iba a decepcionar.
Junto a la Columna hay un cementerio que visto a posteriori en Google Maps parece bonito pero que tampoco lo llegamos a visitar.
Conclusiones de la visita a Alejandría
Probablemente la pregunta más habitual es: ¿vale la pena visitar Alejandría si estoy en El Cairo? Es una pregunta muy difícil de responder. En mi opinión Alejandría es un destino perfecto para hacer una escapada de 1 día, que incluye unas 6 horas de viaje en coche en nuestro caso. Es un día largo, pero es una ciudad que tiene unas características y mezcla de culturas muy particular. Por otro lado, El Cairo es una de las ciudades más espectaculares del mundo y tiene muchísimo que ver y visitar. Diría que para conocer a fondo la capital de Egipto se necesitan 3 días. Así que, si tienes 3 días o menos en El Cairo mi recomendación sería que te quedases allí, pero si tienes un día extra… ¡no lo dudes y visita Alejandría!
Probablemente echéis de menos respecto a otros artículos algunas propuesta gastronómica pero teníamos tanto que ver que apenas paramos a comer un shawarma en un puesto callejero a mitad del día.
Alejandría ha sido históricamente un punto de unión de culturas que se refleja en sus monumentos y los muchos restos que quedan por toda la ciudad. Probablemente sea uno de los pocos lugares en los que se pueda ver esa mezcla. Además cuenta con 2 edificios, aunque solo queda uno realmente, que son o han sido emblemáticos y siempre quedarán en la historia. Destino perfecto para disfrutar del Mediterraneo, la cultura y la arquitectura.